La libra esterlina cae: el turista británico dice 'bye, bye' a España

Si durante 2008 miles y miles de españoles escogieron como destino estrella Nueva York, animados por la caída del precio del dólar, 2009 podría ser el año de Londres. La libra esterlina no para de bajar y en los últimos días vale casi lo mismo que un euro, lo que invita a hacerse una escapadita a Reino Unido. Sin embargo, un euro tan fuerte frente a la libra no es una buena noticia para todo el mundo. Los ingleses se lo pensarán dos veces a la hora de venirse a la Costa del Sol de vacaciones y, los que ya están aquí, llegan justitos a fin de mes.

Las costas españolas son el paraíso para los británicos: calor, playa, pescaíto frito, sol y precios muy asequibles. Al menos hasta ahora. Durante décadas, los europeos han 'bajado' a España en busca de todos estos placeres que, en las islas, duraban todo el año. Por eso, casi el 40% de los turistas que durante 2007 acudieron a Canarias venían de Reino Unido. Este año, el porcentaje es de poco más del 35%.

El número de británicos que durante este año ha viajado a España se ha reducido por la crisis. Lo mismo ha pasado con los turistas que venían de Alemania, Francia y el resto de Europa Occidental. Sin embargo, la caída de ciudadanos de las islas británicas ha sido especialmente fuerte en los dos últimos meses. "Ya sabíamos que la crisis iba a afectar al turismo pero los datos no eran muy malos. Pero, desde octubre, la libra ha caído mucho y eso sí que se ha notado", explica José I. Alonso, presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Santa Cruz de Tenerife.

La clave de este descenso no es la crisis financiera internacional sino la devaluación de la moneda inglesa. Lejos quedaron los días en los que una libra valía casi un euro y medio, aunque tampoco haya pasado tanto tiempo: en verano de 2007, la libra se cambiaba a más de 1,40 euros. Mientras que los españoles que viajaban a Londres veían cómo sus ahorros apenas les cundían, los ingleses disfrutaban de unas vacaciones 'made in Spain' por cuatro libras. Ahora, la fortaleza del euro se lo pone fácil a los españoles mientras que amenaza con dejar más que tocado el principal pilar de nuestra economía. Hoy, una libra se cambia por 1,04 euros, para alegría de todos aquellos que se encuentran en Reino Unido y cobran en euros: estudiantes Erasmus, trabajadores de empresas españolas, becarios...

El caso de las Canarias es especialmente significativo porque los turistas británicos representan el grueso de visitantes, por delante de españoles y alemanes. "Confiamos en cerrar el año con cifras similares a las de 2007, gracias a otros países como Polonia o Rusia pero, si la libra sigue igual, 2009 será duro", indica Alberto Bernabé, gerente de la Sociedad de Turismo de Tenerife. "Lo que ocurre es que no sólo baja el número de turistas sino que también el dinero que se gastan o las noches que pasan".

Las cifras, aunque no tan negativas como en Canarias, son similares en el resto de España y la pérdida de poder adquisitivo de los ingleses se ha notado de inmediato. Durante 2008 (sin contar con los datos de diciembre) el turismo británico ha caído un 2,4% en todo el país pero los datos son alarmantes si nos fijamos en lo que ha ocurrido durante el mes de noviembre y lo comparamos con la misma fecha de 2007. En la Comunidad Valenciana, cayó un 18,9%; en Cataluña, un 18%; en Tenerife, un 18,21%.

Además del turismo, los otros grandes perjudicados tienen un perfil muy similar: británicos que, tras su jubilación, decidieron instalarse en España y que cobran su pensión en libras. Muchos de ellos vendieron sus propiedades en Reino Unido y que en el último año, han visto cómo su poder adquisitivo caía más de un 20%.