El PP cree que el plan de ayudas a los ayuntamientos es tan sólo "una aspirina" frente a la crisis

Madrid.-  El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha reconocido hoy que el plan de ayudas del Gobierno a los ayuntamientos, cifrado en 8.000 millones de euros, supone una inyección económica incuestionable, aunque insuficiente, pues es una "aspirina", y no el "medicamento adecuado" frente a la crisis.

Rajoy se ha referido así al decreto aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros, por el que se destinan 8.000 millones de euros a los ayuntamientos con la prioridad de favorecer la creación de empleo y aliviar el crecimiento de la tasa de paro, que afecta ya a casi tres millones de personas.

En un acto con alcaldes y concejales del partido, el líder del PP ha hecho suya una frase pronunciada antes por la regidora de Valencia, Rita Barberá, quien previamente había afirmado que la iniciativa del Ejecutivo para acelerar la obra pública en el ámbito local es "una aspirina para un señor que está en la UCI".

Todos los participantes en este acto celebrado en la Casa de Campo de Madrid -Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz Gallardón, Teófila Martínez y Rita Barberá, entre otros- han coincidido en este diagnóstico: que el plan del Gobierno es "insuficiente".

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde, Alberto Ruiz Gallardón, han acusado al Ejecutivo de "ir contra la Constitución" al no establecer un nuevo modelo de financiación de las corporaciones locales más "eficiente".

A juicio de la presidenta regional, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero "se ha atrevido a pasar por encima de la Constitución para caminar hacia una España nadie sabe si federal, confederal o qué", y le ha acusado de encogerse "de hombros a la hora de proporcionar a los ayuntamientos los medios necesarios para que puedan prestar los servicios públicos que los ciudadanos demandan".

En este mismo sentido, Ruiz Gallardón ha dicho que la "exigencia" del PP de un modelo de financiación estable "es algo que ya no es una deuda histórica, sino un mandato constitucional".

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha remarcado la necesidad de que los municipios cuenten con un nuevo sistema de financiación, una reivindicación que no callará el PP a pesar de los 8.000 millones de euros movilizados por el Gobierno.

"Zapatero se ha equivocado con los ayuntamientos si cree que los árboles no nos dejarán ver el bosque. El bosque es un nuevo modelo de financiación, el que necesitan los ayuntamientos, eso es lo que hay que abordar", ha resumido la regidora valenciana antes de criticar el actual modelo por "ineficaz".

Su homóloga en el consistorio gaditano, Teófila Martínez, ha abogado por llevar a cabo, desde la administración central, "transferencias a los ayuntamientos acordes con los servicios que necesitan los vecinos", por lo que ha minusvalorado el plan del Gobierno.

Tras destacar que los 8.000 millones de euros a los ayuntamientos supondrán "una ayuda" -"es un hecho objetivo"-, Rajoy ha insistido en que "no sirve" para "arreglar el problema" de los consistorios, "ni mucho menos de las diputaciones, cabildos o consells insulares, que ni siquiera aparecen citados" en el texto del real decreto ley.

En su opinión, "son medidas para una sola vez" que pueden aumentar el gasto corriente, así como el gasto social, y que no resuelven lo que debería ser el "objetivo capital": "que las corporaciones locales puedan pagar sus deudas".

El presidente del PP ha pedido un nuevo modelo de financiación local y ha solicitado otra vez que una línea de crédito del ICO, con importe de 4.000 millones de euros, permita a los ayuntamientos pagar las deudas con las pymes.

Por tanto, según ha destacado, el nuevo plan para las corporaciones locales, "el séptimo paquete de medidas desde marzo", pone de manifiesto "el desorden económico del Gobierno", su "verdadera seña de identidad para abordar la crisis".