Embolsados (o un nuevo palabro, el murse)

Llega el momento de incorporar una nueva palabra a nuestro vocabulario modístico y, lo más sorprendente, perteneciente al género masculino. El vocablo en cuestión es murse, una contracción de man y purse, es decir, bolso masculino, un concepto que realmente no es nuevo, pero que esta temporada está alcanzando unas dimensiones totalmente distintas a las que antes conocíamos.

Hasta hace poco, los hombres limitaban sus bolsos a las mochilas, las carteras de mensajero cruzada y, en el caso de los mayores de 60, la socorrida mariconera. Sin embargo, desde hace algunas temporadas, las firmas más míticas de bolsos y marroquinería se han empezado a acercar al cada vez más interesado en estar a la última público masculino. De ahí que hayan surgido multitud de bolsos con una amplia variedad de diseños y, sobre todo, con formas muy parecidas a los bolsos típicamente femeninos, pero que ya no da pudor llevar si se es hombre.

Pues sí, ha llegado la hora del murse, y también el momento en el cual muchas mujeres dejarán de llevar en sus bolsos las pertenencias de sus parejas, reacias a llevar ningún tipo de apaño con capacidad suficiente para albergarlas. También es el fin de las riñoneras, mochilas de ir al cole y bolsitos cruzados, únicos accesorios hasta la fecha para muchos caballeros. Y es que el bolso masculino, el murse, es ya una realidad que no pone en duda la virilidad de nadie, a pesar de que sus diseños empiezan a asemejarse mucho a los de mujer. No sólo se está generalizando el uso de las dos asas colgadas del hombro, sino que se adaptan modelos de mujer con tamaños ligeramente más amplios para ellos o, directamente, se utilizan piezas femeninas sin ningún pudor.

The Sartorialist, gurú espiritual de medio mundo fashionista, ya se ha hecho eco de este fenómeno murse, y nos ofrece distintas perspectivas tan elegantes como nada feminizantes. Mira si no a este caballero, ataviado con una maravillosa americana de punto y un enorme bolso Mulberry, en vez de un aburrido maletín de ejecutivo. Esta firma empezó hace dos años a vender grandes bolsos de hombre inspirados en modelos femeninos, y es una auténtica precursora del murse. Aquí, una versión más veraniega y juvenil de este accesorio, apto para cualquier época del año.

No sólo es asunto de modernillos de aspecto urbano esto de colgarse un bolso, sino que encaja a la perfección con el típico look ejecutivo: obsérvese el efecto aquí, en negro combinado con un traje blanco, o en forma de shopping bag. El caballero embolsado es posible.

Volviendo al espinoso asunto del curioso binomio que forman bolso y virilidad, no hay que ver a dos ejemplos de macho-macho que se han apuntado al murse. Son Kanye West y Pharrell Williams, híper chic ellos, pero, a la vez, masculinos. Williams incluso hace gala de este accesorio en la portada de la revista Paper. Hay otros como Jamie Hince, on-off novio de Kate Moss, que prefieren cogérselo prestado a su chica, con resultados nada desdeñables.

Las casas de moda y accesorios han visto un buen filón en el murse, y esta temporada algunas como Lacoste o Burberry han lanzado unos cuantos, a imagen y semejanza de los que te proponíamos antes. Ya sabes: asas cortas para colgarte en el hombro o llevar directamente en la mano como una shopping bag. Otra experta en marroquinería masculina, Etro, tiene este otoño un precioso bolso en piel de inspiración deportiva para lucir a diario. Atentos a éste de Fendi con forma de trapecio, que, a pesar de su forma, es para hombre.

Como era de esperar, las marcas más baratas también han hecho sus versiones del murse al alcance del resto de los hombres y, todo sea dicho, no están nada mal. En He by Mango, en continuo crecimiento, este otoño tienen unos cuantos bolsos interesantes como éste de piel negra (tercera foto empezando por abajo) o este elegantísimo de lona de TopMan con detalles en cuero. Algo más caro, 280 euros, es este otro ejemplar de Diesel en cuero marrón y con doble asa. Un poco más mod y juvenil es este en talla de viaje de Fred Perry de PVC, ideal para la rutina diaria, incluyendo el gimnasio. En la firma deportiva North Face hemos dado con este ejemplar de cuadritos tan urbano como elegantote. Por último, en ASOS tienes esta original pieza de Ally Capellino 100% cuero con las asas cortas y con un original diseño que permite llevar hasta un ordenador portátil.

Pero no todos los bolsos masculinos son igual de buenos y socialmente aceptados. También hay claros horrores y macarradas totales que hay que evitar.

Es comprensible que el murse se adapte despacito, y más en un lugar como España, donde los hombres a veces pecan de clásicos y hasta aburridos. Hay otras opciones más allá del bolso para llevar tus pertenencias, y una de ellas se está viendo mucho este otoño-invierno. Se trata de la chaqueta de cuatro bolsillos, de inspiración sahariana y toda una solución. No hay marca que esta temporada se haya resistido a lanzar un modelo de este tipo: Tommy Hilfiger acolchada y marrón, Yohji Yamamoto tiene este chaquetón con cuatro bolsillos externos más dos internos, Paul & Joe esta preciosa chaqueta gris con doble botonadura cruzada…

Y también la tenemos en barato, como esta parka rústica de Diesel o una clásica y recurrente sahariana negra de H&M (segunda foto desde arriba). Eso sí, recuerda que los cuatro bolsillos no son cuatro capazos y, si no quieres parecer una suerte de explorador urbano, no hace falta que los llenes hasta los topes. Para el paraguas, la botella de agua, la agenda y el bocata, mejor hazte con un murse.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.