Fráncfort (Alemania).- La compañía alemana de servicios y suministro de energía E.on mantendrá los proyectos en marcha en España pese a que la crisis financiera ha encarecido su financiación.
En una conferencia telefónica para presentar los resultados de los nueve primeros meses del año, el presidente de E.on, Wulf Bernotat, dijo que la compañía seguirá con la integración de Viesgo y de los activos adquiridos de Endesa.
E.on subió en los nueves primeros meses del año el beneficio neto hasta 4.500 millones de euros (5.670 millones de dólares), un 6 por ciento más que en el mismo periodo de 2007.
Además, Bernotat señaló que E.on mirará los cambios en el mercado energético español y que estudiará los activos que vendan Gas Natural y Unión Fenosa cuando llegue el momento para ampliar su posición en España, como ya había informado el pasado agosto.
"Seguimos el proceso con mucho interés y la posibilidad de que las autoridades reguladoras establezcan condiciones si salen algunos activos a la venta pero, de momento, no hay propósitos concretos", enfatizó Bernotat.
Según informó hoy la empresa germana, el volumen de negocios mejoró entre enero y septiembre un 22 por ciento, hasta 60.500 millones de euros (76.230 millones de dólares), en comparación con los nueve primeros meses del año pasado, por las participaciones adquiridas en España, Italia y Rusia.
Bernotat consideró que "los nueve primeros meses del ejercicio muestran que hemos ajustado las agujas correctamente para orientar nuestra empresa de forma más internacional y al beneficio".
E.on hará frente a la actual crisis financiera con programas para mejorar las estructuras y los procesos, según Bernotat.
E.on sufrió en el tercer trimestre del ejercicio unas depreciaciones de 294 millones de euros (370 millones de dólares) en sus inversiones financieras.
El beneficio antes de intereses e impuestos (Ebit) mejoró en los nueve primeros meses del año hasta 7.700 millones de euros (9.702 millones de dólares), un 8 por ciento por encima de los mismos meses del pasado año.
Las ventas en la región de Europa Central compensaron el lastre contable por la desactivación de las centrales atómicas de Krümmel y Brunsbütel, la reducción de la retribución por el uso de sus redes eléctricas y el acuerdo con las autoridades antimonopolio de no aplicar el aumento de los costes del gas.
El director de Finanzas de E.on, Marcus Schenck, anunció que el gigante energético va a interrumpir el programa de recompra de acciones que lleva a cabo ya que "no es el momento adecuado para incrementar el endeudamiento con más recompras de acciones".
Del programa de recompra de acciones, que tiene un volumen de 7.000 millones de euros (8.820 millones de dólares), E.on ha adquirido hasta ahora títulos propios por valor de 6.500 millones de euros (8.190 millones de dólares).
E.on prevé continuar con el programa en tanto en cuanto se relaje la situación en los mercados financieros.
Schenk explicó que las condiciones de financiación para E.on se han encarecido en un punto porcentual.
Para el conjunto del año 2008, E.on prevé superar el Ebit logrado el pasado ejercicio económico entre un 5 y un 10 por ciento e incrementar la ganancia neta de una forma moderada.
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