López (PSE-EE) defiende un cambio en Euskadi "sin revanchas ni facturas"

Bilbao.-  El secretario general del PSE-EE, Patxi López, ha asegurado que en Euskadi "hay una nueva mayoría que quiere abrir un nuevo tiempo" y cree que los socialistas representan "el cambio que necesita Euskadi, un cambio que no pretende cobrarse revanchas ni pasar facturas a nadie".

López ha tomado parte este mediodía en un acto político en el barrio bilbaíno de Txurdinaga, con motivo del aniversario de la Agrupación Ramón Rubial, donde ha asegurado que su partido está "en mejores condiciones que nunca para dirigir los destinos de este país".

El dirigente socialista y candidato a lehendakari ha proclamado su voluntad de "hacer las cosas de otra manera" para que "dejemos de ser un país de conflictos y de broncas permanentes, recuperemos el entendimiento" y construyamos Euskadi "con otras prioridades", porque "no estamos abocados al desencuentro permanente y a dar vueltas a la noria identitaria que nos lleva a callejones sin salida".

"La Euskadi democrática, la Euskadi de las libertades, de la convivencia, del encuentro y de los derechos sociales es la Euskadi posible", ha agregado.

López ha reivindicado la figura de Ramón Rubial, "el primer lehendakari", y ha recalcado que "el autogobierno que hoy disfrutamos se lo debemos a gentes como él", entre las que también citó al líder nacionalista Juan de Ajuriaguerra, "que entendieron que por encima de las legítimas diferencias políticas, en los momentos importantes hay que poner lo que nos une".

"Sólo el acuerdo, sólo el pacto entre diferentes hace avanzar a un país", ha asegurado López.

Frente a ello ha criticado "la obsesión identitaria" del Gobierno Vasco tripartito y a quienes colocan "el doctrinarismo partidista y el ansia de perpetuarse en el poder por encima incluso de convivencia democrática, porque han preferido enfrentar a unir".

Por eso reivindicó la forma de hacer política de Ajuriaguerra y Rubial, "que Ibarretxe ha olvidado", basada "en la búsqueda del entendimiento entre diferentes, en el diálogo abierto y en la cercanía con la ciudadanía y el ansia de transformación social".

"Quiero ser lehendakari para hacer las cosas de otra manera -ha insistido- para desterrar el enfrentamiento permanente en el que se nos ha querido sumir. No quiero formar un gobierno para dar alas a mis aspiraciones personales. Conmigo no habrá un Plan López".

En esta línea ha defendido un proyecto que ponga en el centro a la persona "y no las ensoñaciones milenarias que nos atan a un pasado atávico que nos impide avanzar. Quiero ser lehendakari, como lo fue Rubial, para sumar, para decidir objetivos compartidos, que lejos de dividirnos despierten la ilusión de la sociedad vasca".

"Lo más importante que tiene que hacer un gobernante es cuidar la convivencia. Convivir es compartir, es abrirse, es respetar al que piensa diferente, es integrar y aportar, y por eso el proyecto de los socialistas, es un proyecto para la convivencia", ha resumido.

Junto a López ha intervino en el acto político el secretario general del PSE-EE de Vizcaya, José Antonio Pastor, quien ha ironizado sobre la celebración ayer por parte de los nacionalistas de lo que ha definió como "día de la no consulta", que ha considerado propio de Alicia en el País de las Maravillas.

"Por lo menos tuvo alguno bueno -ha agregado-, que Ibarretxe no tuvo que madrugar para ir a votar en una consulta que nos anunció y que sabía que no se iba a celebrar".

Pastor ha criticado la actuación de Ibarretxe, del que ha asegurado que "va de víctima para ver cuántos votos saca del entorno abertzale" y ha señalado que si para ello "tiene que poner en riesgo la convivencia, lo hace; y si tiene que mentir descaradamente sobre las frustradas conversaciones del Gobierno con ETA, pues lo hace también".