Después de años sin usar poco más que una gorra, la explosión de sombreros aumenta una temporada tras otra. Incluso ya hay difuntos y sucesores como le pasó al porkpie, sustituido por el fedora, que ahora a su vez se ve relevado por el gorrito de la temporada, el bombín. Las beneficiarias son sobre todo las mujeres, aunque en hombre se puede conseguir un aire Naranja Mecánica de lo más chic. Puede que no sea el sombrero que más abrigue, pero combinado con un look masculino semi andrógino (pantalón negro+camisa+taconazo) el resultado es simplemente perfecto. Y, entre tú y yo, si no te ha dado tiempo a peinarte, un bombín te apaña el pelo en cuestión de segundos.
¿Fue Keira Knightley la primera en ponerse el bombín en la campaña de Coco Mademoiselle? Sí, aquella en la cual su photoshopeado pecho estaba cubierto únicamente por este sombrerito. En el imaginario popular el pionero fue Charles Chaplin aunque su personaje, Charlot, era pobre como él solo y desde luego que no lo llevaba por una cuestión de moda. Lo cierto es que esta tendencia parece inspirarse un poco más en el glamour de Liza Minelli en Cabaret, aunque mucho menos decadente.
No así todo el famoseo que cubre sus cabecitas con bombines, que han surgido como hongos (otra forma de llamar a este accesorio, por cierto) cuando acuden a alfombras rojas y en su vida civil. ¿Se puede lucir con tanta clase como Rachel Bilson? El estilismo, sombrero incluido, es simplemente perfecto. Tampoco le queda mal a Mischa Barton, aunque lo que se carga toda la imagen son esas horrendas extensiones-pelo cuchifrito que emergen por debajo de las solapas. La penúltima trendsetter de estos meses, Daisy Lowe, también le ha encontrado las ventajas a este gorrito, tan británico como ella.
Además del tamaño original, pequeñito y con el ala estrecha, también son muy interesantes los que son algo mayores, como los que hemos visto en la actual colección de Sonia Rykiel. Éstos también varían del clásico negro hacia tonos como el naranja o incluso blanco.
No es muy complicado encontrar un bombín en el mercado actual, y menos desde que los sombreros se empezaron a normalizar como accesorio. Eso sí, nuestra recomendación, y más atendiendo a la coyuntura económica, es que te compres uno barato porque su actualidad es limitada y, seamos sinceros, ¿te lo vas a poner a diario? En Top Shop tenemos el auténtico por poco más de 30 euros, y el mismo en TopMan para hombre por un pelín más.
La celebre casa sombrerera Goorin tiene en su haber, y bastante asequibles, un modelo de bombín femenino negro tradicional de unos 40 euros para mujer, además de este otro inspirado en La Naranja Mecánica para chico y con el ala estrecha bastante más caro ya que es de lana.
El inconmensurable catálogo de ASOS tiene una amplia sección llena de bombines entre los cuales destaca éste en versión mini para llevar como tocado. ¿Puede haber algo más mono?
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