Río de Janeiro.- La selección de Brasil parte como favorita para adjudicarse la séptima edición de la Copa América masculina de voleibol, que desde mañana hasta el próximo domingo se disputará en el gimnasio Aecim Tocantins de Cuiabá, capital del estado brasileño de Mato Grosso.
Encuadrado en el grupo B, Brasil tendrá como rivales a México y Venezuela, mientras que Estados Unidos -actual campeón-, Cuba y Argentina jugarán en el grupo A.
Los dos primeros de cada grupo se clasificarán para las semifinales.
Tras acabar la Liga Mundial en una decepcionante cuarta posición y perder la final de los Juegos Olímpicos de Pekín ante Estados Unidos, Brasil espera romper la hegemonía de los norteamericanos, que han ganado las dos últimas ediciones del torneo (2005 y 2007).
La selección que dirige Bernardinho tendrá, además, la motivación extra de intentar conseguir por primera vez el trofeo en su propio territorio, después de haber perdido las finales en las tres ediciones que se disputaron en Brasil.
En el 2000 los brasileños cayeron ante Cuba y en 2005 y 2007 ante Estados Unidos, pero conquistaron el oro en las tres ocasiones en las que el torneo se disputó en otro país.
Seis jugadores que ganaron la medalla de plata en Pekín (Serginho, André Nascimiento, Rodrigao, Dante, Bruno y Murilo) formarán parte de la renovada selección brasileña, que inicia un nuevo ciclo tras el adiós de varios de sus jugadores más importantes.
La nueva selección tiene además la característica de que cinco de sus jugadores superan los dos metros de altura.
Por su parte, Estados Unidos llega para defender los dos últimos títulos animado por la conquista de la Liga Mundial en julio y la medalla de oro en Pekín.
Sin embargo, los estadounidenses se presentan con un plantel muy renovado, por lo que se prevé difícil que puedan reeditar el título.
Estados Unidos debutará mañana ante Cuba, equipo que llega a Brasil con las bajas a última hora de una de sus principales figuras y de una de sus grandes promesas, ambos por indisciplina.
Rolando Jurquín, una de las estrellas del elenco cubano, fue suspendido por la federación de su país por cuatro meses, mientras que el joven Yoandri Leal, de 20 años, quedó descartado por "faltas menores".
El equipo cubano de voleibol se encuentra en plena fase de transición, con jugadores muy jóvenes que tratan de tapar el hueco dejado por figuras que se han retirado en los últimos años y por las deserciones.
Argentina, por su parte, afrontará el torneo con Juan Cichello como entrenador interino y un plantel de corte juvenil, que ya participó en el torneo pre-olímpico y en el que destacan los nombres de Rodrigo Quiroga, Nicolás Uriarte y Facundo Conte.
En la selección venezolana, la principal novedad estará en el banquillo, tras el adiós del brasileño Ricardo Navajas después de haber participado en la cita olímpica y la llegada de Miguel Cambrero.
Respecto al plantel que disputó los Olímpicos, son baja Enardo "Harry" Gómez por lesión e Iván Márquez, Rodman Valera y Carlos Luna por motivos personales. Serán reemplazados por Deivi Yustiz, Pedro Siso y Yhonder Fernández.
Por último, la selección mexicana, de las participantes la peor situada en el ránking de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), se ha marcado como objetivo la clasificación para las semifinales de la competición.
Cada equipo se enfrentará a partido único a los dos otros países de su grupo.
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