Pekín.- El ciclista madrileño Roberto Alcaide no pudo hoy con el checo Jiri Jezek y el rumano Carol Eduard Novak y se colgó un bronce en la contrarreloj en carretera categoría LC 2, reservada a corredores con minusvalías físicas, que él mismo calificó de "agridulce".
"Siempre que haces podio estás satisfecho porque es un premio al trabajo realizado, pero cuando vienes de ganar en mundiales o en Juegos como en Atenas 2004 y de haber vencido a estos mismos rivales de hoy, siempre te queda un sabor un poco agridulce porque sabes que puedes vencerles", explicó Alcaide a la finalización de la prueba.
"Esta vez les ha tocado a ellos ganar y así es el deporte. No siempre puede vencer el mismo", agregó el madrileño, de 30 años y que sufrió la amputación del pie izquierdo al chocar contra un quitamiedos mientras participaba en la Vuelta a Extremadura 2000 para ciclistas elite.
El corredor de San Sebastián de los Reyes realizó un tiempo de 34:18 en los 24,8 kilómetros de que constó un recorrido con perfil de dientes de sierra, 27 segundos más que el rumano, plata, y 42 más que el checo, oro y que ya le había arrebatado al madrileño el título en la prueba de persecución individual en pista en Pekín 2008.
"El circuito era muy duro, con demasiadas curvas y muchas subidas y bajadas. No se adecuaba mucho a mis características, ya que soy un contrarrelojista más de ritmo constante", estimó Alcaide, que era uno de los máximos favoritos para colgarse el oro en la prueba.
"No creo que me haya podido la presión. He venido con la tranquilidad del trabajo bien hecho y a darlo todo como así ha sido. Quería el oro con todas mis fuerzas y he salido a por él, pero hoy ha sido el día que más he sufrido sobre la bicicleta y no cabe sino darle la enhorabuena a Jezek y Novak", afirmó un serio y cansado Alcaide tras la cuzar la línea de meta y bajo un calor de justicia.
Agregó que "tal vez sea el mejor momento" de su carrera teniendo en cuenta su estado físico, pero subrayó que "han venido dos personas más fuertes y ya está".
Sobre la prueba, en la que salió a por todas desde la rampa de salida, detalló que, además del exigente recorrido, acusó el sofocante calor y que se quedó sin agua a diez kilómetros de la llegada al "beber más de lo normal".
"Sabía que iba por detrás de Jezek a mitad de carrera porque al cruzarnos en la primera vuelta (los corredores dieron dos a un circuito de 12,4 kilómetros) ya le vi que iba mejor", sostuvo.
"En la segunda vuelta lo he dado todo. Ya no tenia fuerzas de dónde sacar. Estoy satisfecho por eso, porque me he entregado a tope", añadió el madrileño, que señaló que optó por no utilizar "pinganillo" porque en prefiere ir a lo suyo, centrado en su cabeza, y porque "en una contrarreloj corta como está no influye en nada que te digan que vas veinte segundos por arriba o por abajo".
Alcaide participará mañana en la prueba en ruta LC1/2-CP4, en la que correrá junto al guipuzcoano Amador Granado y el también madrileño y buen amigo César Neira, que logró esta mañana el oro en la contrarreloj CP 4, reservada a ciclistas con parálisis cerebral.
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.