Guadalajara.- María del Mar Lorenzo, la jueza de Sigüenza que instruye el caso por el incendio de Guadalajara de 2005 en el que murieron once personas, ha aplazado hasta el próximo 9 de septiembre la declaración como imputada de la ex-consejera de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, Rosario Arévalo, fijada inicialmente para el 30 de junio.
La declaración de Arévalo, imputada por un delito forestal por imprudencia grave, ha sido aplazada a petición de uno de los abogados, según ha informado hoy en un comunicado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJC-M).
La jueza instructora comunicó a las partes el pasado 3 de junio la imputación de Arévalo a través de una providencia, a la que tuvo acceso EFE.
En ella, la juez apreció "carencias importantes en cuanto al control del uso de las barbacoas, su vigilancia, la ausencia de medidas específicas y adecuadas, la defectuosa ejecución y control del Plan de Emergencias de incendios forestales de Castilla-La Mancha y defectos en la formación y en la actividad de extinción".
Arévalo, quien tras su dimisión el 21 de julio de 2005 como titular de la Consejería de Medio Ambiente ha ejercido en la Empresa Nacional del Uranio (ENUSA), ha declinado hacer declaraciones tras su imputación.
Hasta el momento son 29 las personas imputadas en esta causa, entre las que, además de Arévalo como el más alto cargo político, figura también el delegado provincial de Medio Ambiente, Sergio David González, y el último imputado ha sido Carlos Rojo, el vigilante forestal que había en la torre de vigilancia de la Riba de Saelices (Guadalajara) cuando ocurrió el suceso.
Rojo, que acudió el pasado lunes al juzgado de Sigüenza a declarar como testigo, salió como imputado y ha sido llamado para prestar declaración como tal por un delito de incendio forestal por imprudencia grave el próximo 1 de septiembre.
Según la providencia, de su actuación podrían derivarse "importantes carencias y retrasos en la detección del incendio objeto de la presente causa y en la pronta puesta en marcha del mecanismo a seguir en caso de emergencia, todo ello en relación a las funciones que tenía encomendadas derivadas de las competencias propias del puesto de trabajo que desempeñaba como vigilante forestal".
El próximo 16 de julio se cumplirán tres años del incendio originado en una barbacoa del paraje Cueva de los Casares del parque natural del Alto Tajo, en el municipio de Riba de Saelices.
Al día siguiente murieron once de los doce componentes de un retén de extinción procedente de Cogolludo y ardieron 12.784 hectáreas de las tierras del antiguo Ducado de Medinaceli en los cinco días en que se mantuvo activo el fuego.
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