Hace unos días leíamos la noticia de que unas chicas de un instituto en Salford (Reino Unido), hartas de no poder entrar en clase con las uñas pintadas, han encontrado una solución para no infringir las normas y sortearlas con bastante arte. Se trata de una laca de uñas que, en contacto con la luz del sol, se vuelve roja; dentro de clase desaparece como por arte de magia, convirtiéndose en una sombra imperceptible.
Qué habrían dado muchas porque ese invento, que se va a comercializar en las próximas semanas, hubiera estado en las tiendas en sus días de adolescencia. Y es que sin ir tan lejos como estas inglesas todas hemos hecho nuestros pinitos para ¿engañar? a nuestros padres y profesores.
Sí, lo de vestirse en casa de una amiga, remangarse el uniforme con grapas, clips y demás artilugios y maquillarse en el ascensor para subir varios tonos el color del pintalabios nunca coló. Y qué decir de los experimentos cosméticos de la Ragazza como la mascarilla de yogur, las caseras limpiezas de cutis, el limón para aclarar el pelo... Pero dejando atrás la 'artesanía teenager' cada vez hay más productos de belleza dedicados a las jóvenes
Antes de hablar de maquillajes y potingues, recordemos cuál suele ser el principal problema de la piel joven -y la que no lo es tanto-: la grasa y, poniéndonos en lo peor, el acné. Es algo que no se debe tomar a la ligera, especialmente cuando hablamos de los casos más severos. Cualquiera que sea o haya sido adolescente sabe perfectamente que hay mil líneas de cremas, tónicos, jabones limpiadores y exfoliantes que ayudan a atenuar el acné. Por eso sólo vamos a mostrarte algunos productos especiales. La recién relanzada línea Nivea Visage Young tiene una crema hidratante con color que permite no ir maquillada. La línea Árbol de Té de The Body Shop tiene otras cosas más especiales como unos pequeños tissues antibrillos para llevar en el bolso. En la clásica Normaderm de Vichy se puede encontrar un stick secante SOS para acabar en el menor tiempo con esa espinilla inesperada. Por cierto, el acné no se seca con el sol. Al contrario. Y ahora que llega el buen tiempo hay que usar crema protectora, como esta Emulsión SPF40 de Avene.
El cabello adolescente también está afectado por esta tendencia grasa, así que hay que actuar con un lavado más frecuente -olvida esa leyenda de que si te lavas mucho el pelo se engrasa más- y, sobre todo, con el producto adecuado. El clásico, T/Gel de Neutrogena, purifica el cabello y acaba con la caspa casi desde la primera aplicación. Si el problema no es especialmente grave prueba con los antigrasa de las líneas más económicas que ayudarán a que el pelo brille y no esté apelmazado. Para fijar, despeinar, humedecer, ponerte pinchos y todo lo que puedas imaginar (y con unos precios muy asequibles) la gama Got2Be es la tuya. Atentos a los nombres: Carpe Denim, ¡Subidón!, Fíjate bien…
Y con todo limpio y esplendoroso ya podemos hablar de maquillaje; aquí encontrarás algunos productos que se adaptarán a tus ingresos –y a los de cualquier mileurista, para qué negarlo-. Un consejo: cuando se sufre de acné no se recomienda el uso de bases de color; si es tu problema pero no puedes prescindir de ellas, utiliza Unifiance de La Roche Posai, de farmacia. Tampoco está nada mal Idéal Balance de L’Oréal, que es de larga duración y deja respirar a la piel. Y un truquillo para cuando no quieras ir muy maquillada pero necesites esconder rojeces: mezcla un poco de crema hidratante no grasa con un toque de base, mézclalo bien y aplícatelo después de la ducha como la hidratante.
Si hay algo de lo que pueden disfrutar las adolescentes es de una gran variedad de colorido en el maquillaje. Desde los colores pastel que usan las más jovencitas -o las atrevidas cuando quieren disimular que van arregladas- hasta los más intensos y atrevidos. Y es que el mercado de la belleza teen es todo un filón, no sólo para las empresas sino para las adultas ávidas de productos baratos, con colores arriesgados y muy divertidos. Firmas como Pupa, además, también hacen hincapié en el diseño, y sus cofres son cada cual más original. Las Supernenas también tienen unas paletas de maquillaje que tampoco se quedan atrás. Dos marcas que no pueden faltar en un neceser adolescente por su buena relación calidad-precio (son muy baratas y ofrecen excelentes resultados) son Pinaud y Deborah. Por ejemplo, una sombra de la primera cuesta 4.75 euros, y un lápiz de ojos de la segunda 8.
En el apartado de caprichos, aunque siempre pensando en las economías más jóvenes, Benefit Cosmetics tiene una sección juvenil con nombres tan sugerentes como Rush Hour, una barra de labios que también vale para las mejillas, o Gee that was quick, un desmaquillante. La línea Fafi de MAC es otro must juvenil gracias a sus colores vibrantes y a su inspiración hip hop. Por último, ¿qué decir de una colonia en roll-on de Hello Kitty? Pues que ¡quién tuviera 16 años para llevarla!
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