El precio del oro se disparó ayer hasta alcanzar el máximo histórico de los 1.000 dólares por onza. Hoy ha vuelto a marcar un nuevo récord al cotizar a 1.007 dólares en Londres. Históricamente, desde los alquimistas que buscaban la piedra filosofal hasta los bancos, guardándolo para proteger las divisas, el oro siempre ha jugado un papel esencial en la economía, pero ¿qué influencia tiene ahora? Te ofrecemos una guía para comprender el papel del metal precioso en el contexto de la crisis económica internacional.
Desde que estalló la crisis de las hipotecas subprime, el oro ha ido aumentando su valor. El momento de incertidumbre que se vive en la economía norteamericana, sobre la que planea el fantasma de la recesión (o por lo menos el de la desaceleración) ha hecho que los inversores, especialmente estadounidenses, corran a resguardarse de la tormenta en el oro, un activo refugio que, según José Hinojo, de Renta 4, "en situaciones de crisis siempre se ha comportado positivamente, porque no pierde valor".
El oro sirve además de protección frente a la inflación, ya que aunque la moneda se deprecie, el metal cubre la pérdida porque conserva su valor e incluso aumenta, como está sucediendo ahora.
Además, según Hinojo, esta filosofía de inversión induce a que tradicionalmente exista una regla de relación inversa entre el dólar y el oro: siempre que la moneda se hunde, los inversores acuden a un valor seguro como es el metal para proteger su situación, lo que hace que aumente su precio. El dólar sufrió esta semana una caída más frente al euro, alcanzando su nivel más bajo. Si esta tendencia continúa, previsiblemente el oro continuará aumentando su valor.
Otro factor decisivo en el aumento de precio del metal precioso es el aumento de demanda proveniente de economías emergentes como China e India y la falta de oferta. "Hay pocas minas de oro y las que hay están sobreexplotadas, lo que ha hecho que el oro se encarezca en los últimos años", indica Hinojo. Por otra parte, Sudáfrica, el principal suministrador del metal en el mundo, ha sufrido en los últimos meses problemas eléctricos que han incidido de forma negativa en la producción del metal.
Pues a no ser que seas adicto a las alhajas, en poca cosa. Al contrario que el petróleo, cuyo precio enseguida repercute en las economías familiares y en el consumo diario, el oro sólo afecta a productos de joyería. Este metal tampoco se emplea para casi ningún proceso industrial por lo que en principio no debería encarecer ningún bien. Según José Manuel Amor, socio de Analistas Financieros Internacionales (AFI), quizás en India, donde existe cierta tendencia a invertir en joyas, puedan dejarse sentir la subida en el precio.
En la actualidad las reservas de oro del Banco de España ascienden a 9,1 millones de onzas cuyo valor equivale a 5.795 millones de euros. El Banco de España ha ido desprendiéndose de su oro en los últimos años, al igual que los demás bancos centrales europeos, que acordaron con la creación del euro una paulatina venta del metal que guardaban en sus arcas.
La razón es que la principal función del metal consistía en defender las divisas nacionales de eventuales devaluaciones, algo que dejó de tener sentido con la moneda única. Sin embargo, ahora el encargado de velar por el tipo de cambio es el Banco Central Europeo.
Para evitar la venta masiva, en 1999 los bancos centrales europeos firmaron el 'Central Bank Gold Agreement', un acuerdo por el cual se decidió limitar las ventas conjuntas de oro a 400 toneladas anuales. Un segundo acuerdo fue ratificado en este sentido en el año 2004, pero estableciendo la cantidad máxima en 500 toneladas.
La rápida venta de los activos en oro por parte del Banco de España (entre enero y mayo del año pasado se deshizo del 25% de sus reservas) suscitó en su día la preocupación en algunos círculos financieros. Un artículo del diario inglés Daily Telegraph indicando que España podría estar financiando el déficit comercial mediante la venta del oro hizo saltar las alarmas. El ministro de Economía, Pedro Solbes, se vio incluso obligado a intervenir para atajar las críticas y recordar que la intención de la operación era deshacerse de un oro no rentable y reinvertir en bonos de renta fija.
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.