Bogotá.- El regreso a la libertad de cuatro ex congresistas que durante más de seis años permanecieron cautivos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) fue celebrado hoy por gobiernos y organizaciones internacionales, que exhortaron a esa guerrilla a entregar a todos los secuestrados en su poder.
Las FARC liberaron hoy en las selvas del departamento de Guaviare (sureste) a Gloria Polanco de Lozada, Luis Eladio Pérez Bonilla, Orlando Beltrán Cuéllar y Jorge Eduardo Gechem Turbay, quienes fueron recibidos por una comisión humanitaria de Venezuela y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
El Gobierno estadounidense se declaró "agradecido" por la liberación de los cuatro, pero insistió en la necesidad de que se entregue también al resto de los cautivos, entre los que figuran los estadounidenses Marc Gonsalves, Keith Stansell y Thomas Howes, secuestrados por las FARC en febrero de 2003 en las selvas de Caquetá, sur de Colombia.
El portavoz del Departamento de Estado, Tom Casey, aseguró que están "muy agradecidos de que haya ocurrido" la liberación de Polanco, Pérez, Beltrán y Gechem, secuestrados por las FARC en distintas acciones entre 2001 y 2002.
"Es condenable que las FARC tomaran a estos individuos como rehenes en primer lugar, y es igualmente condenable que sigan reteniendo rehenes", agregó el portavoz.
Según datos del Gobierno colombiano, las FARC todavía tienen secuestrados a 40 políticos, policías, militares y extranjeros que pretenden canjear por unos 500 rebeldes presos, así como a más de 700 personas con fines de extorsión.
"Pedimos a las FARC que liberen a todos los rehenes que tienen y que garanticen su seguridad mientras tanto", insistió el portavoz del Departamento de Estado.
Desde Buenos Aires, el canciller argentino, Jorge Taiana, expresó "la gran satisfacción" del Gobierno de su país por la liberación de los cuatro ex congresistas, hecho que consideró "otro paso hacia un acuerdo humanitario" en Colombia.
"Estamos ciertamente muy contentos por la liberación. Esta nueva decisión unilateral de entrega es otro paso hacia un acuerdo humanitario y todos debemos contribuir a la posibilidad y ayudar en la búsqueda de ese acuerdo", indicó.
Taiana recordó que Argentina "se ha pronunciado desde hace mucho tiempo a favor de ese acuerdo humanitario".
El Gobierno brasileño dijo que recibió "con gran satisfacción" la noticia de la liberación de los ex congresistas y felicitó al presidente colombiano, Álvaro Uribe, y a su homólogo venezolano, Hugo Chávez, por "las medidas que posibilitaron la entrega", según una nota divulgada por la Cancillería.
El mensaje del Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño agregó que también "espera" que este "gesto" conduzca a "nuevas iniciativas de orden humanitario" en Colombia.
Por su parte, el presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo que el conflicto entre las FARC y el Gobierno de Colombia se solucionará con "pactos" y no con "represión", al elogiar el papel de su colega y amigo Hugo Chávez en la liberación de hoy.
Para Morales, la entrega del grupo de ex congresistas es una "muestra" de que las soluciones en Colombia "van por el diálogo y no por la represión".
En una breve conferencia en La Paz, el mandatario agregó que el Gobierno colombiano y la comunidad internacional deben empezar a buscar "soluciones pacíficas, duraderas y no bélicas" para el conflicto armado interno de ese país.
Francia también celebró el regreso a la libertad de los ex legisladores en un comunicado del ministro de Exteriores, Bernard Kouchner, quien dijo que ese paso constituye un "poderoso aliento" para tratar de conseguir la de los otros cautivos, incluida la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, también nacional francesa.
Previamente, el Alto Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea (UE), Javier Solana, Amnistía Internacional (AI) y los Comités de apoyo a Ingrid Betancourt expresaron su satisfacción por la entrega de hoy y reclamaron la libertad del resto de secuestrados.
El Gobierno de Colombia no ha hecho declaraciones sobre la liberación propiamente dicha, y algunos funcionarios se limitaron a responder a un comunicado de las FARC en el que ese grupo señaló que no harán más entregas unilaterales hasta que el Gobierno no desmilitarice dos municipios del suroeste del país para negociar un acuerdo humanitario.
"Es claro que nosotros no podemos retirar la Fuerza Pública de dos municipios y dejar 114.000 personas que viven en estos municipios bajo el total control de las FARC", dijo el alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
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