Después de la triste, pero glamourosa despedida de Valentino, parece que el mundo de la haute couture se ha quedado un poco huérfano. Pero sólo lo parece, porque hay otro italiano que ya está empezando a tener fans acérrimas entre sus millonarias clientas. Se trata de Giambattista Valli, que parece dispuesto a cubrir el vacío creativo y de lujo que dejó su compatriota.
No sufráis, aguerridas compradoras de alta costura. Por suerte, la moda es un ir y venir de gente y ya hemos encontrado un sustituto para el genio italiano, Giambattista Valli, que está siguiendo los pasos del maestro para convertirse en el nuevo 'couturier' de las más ricas y célebres.
Valli nació en Roma en 1966, y desde que era un niño pasaba horas dibujando trajes de alta costura, lo cual le permitió conocer a la perfección, con el paso de los años, la silueta femenina. Trabajó con distintos diseñadores italianos (Roberto Capucci, Fendi, Krizia, Ungaro) hasta que en marzo de 2005 presentó en París su primera colección en solitario con su propio nombre. La leyenda estaba escrita.
Desde su paso por otras casas de moda hasta hoy, su estilo se ha caracterizado por su amor por las formas femeninas, por la limpieza de los cortes y, paradójicamente, por su originalidad. Ha sido capaz de trasladar a la alta costura detalles del prêt à porter y viceversa, ya que su línea de calle es un auténtico lujo. Se atreve con el color, aunque el negro absoluto es otra de sus especialidades; sin duda, si hay algo que gusta a las que llevan su ropa es lo mucho que favorece por muy arriesgado que sea el diseño. Si Valentino encontró sus musas en mujeres como la refinada Rosario Nadal o la (cómo definirla) muy especial Nati Abascal, Giambattista es el fan número 1 de Victoria Beckham. Tanto lo es, que le ha dedicado unos zapatos, los Victoria Shoes, unas sandalias de 'sólo' 15 centímetros inspiradas en ella. Pero la cantante también es una completa fanática del diseñador, y ya se la ha visto en muchas ocasiones completamente pertrechada por él, como en la boda de Tom Cruise o simplemente para salir un rato de compras.Ella tiene un Valli para cada ocasión.
En general, no hay estreno o fiestón en Hollywood sin unos cuantos trajes de Giambattista pasando por su alfombra roja, y es que son muchas las celebrities que se han rendido a los encantos de esta firma. Por su parte, el creador ya va teniendo grandes amigas que le apoyan siendo sus mejores embajadoras en todo el mundo, como la propia Victoria o Mischa Barton. A diferencia de Valentino, éste se rodea de unas famosas mucho menos lánguidas y estiradas, y prefiere un carácter algo más polémico, un imagen siempre un poquito macarra y, por qué no, un cierto toque kitsch.
Como no podía ser de otra manera, Valli se ha rendido a los encantos del dinero y ha diseñado una carcasa para Nokia; esperemos que no acabe licenciándolo todo y terminemos encontrando por ahí hasta papel higiénico con su nombre. De momento, sólo lujo, sofisticación y un poco de sentido del humor y mala leche que, exceptuando a Chanel, se echan de menos en el mundo de la alta costura.
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