A finales de año lanzaremos una web. Informativa, útil y abierta. Aquí te contamos cómo se fabrica. Sin trampa ni cartón. Con entusiasmo y alguna cosa más...
Sacamos los ordenadores pero guardamos las cajas y los protectores. Alberto se convierte en improvisada escultura y si no fuera porque es parte fundamental del equipo técnico, seguro que le lanzaban una OPA de la Saatchi Gallery.
Nuestra intención es explotar el talento y usar la intuición para encontrar esos temas que nos rodean y suelen pasar desapercibidos. Así, antes de tirar cualquier cosa a la basura, le buscamos un uso. Porque no todo vale, escudriñamos lo que otros considerarían un desperdicio. Y le damos el valor que merece, ni más ni menos.
Siguiendo los sabios consejos que de niños mamamos de la plana mayor de Barrio Sésamo, exploramos otros territorios, cotidianos y extraordinarios. Y los compartimos. Tal cual. Asuntos que no centran los intereses para los grandes medios de comunicación, adquieren su auténtico tamaño en nuestra web de información. La apuesta exhaustiva por la política y la economía no constituirán nuestra columna vertebral. Para mantenernos erguidos optamos por la evolución natural de la red, dejando las soluciones ortopédicas para quienes consideran que internet todavía necesita asirse a la mano de sus papás para caminar.