En 2006 empezaron los primeros sustos, pero el origen de la crisis actual se puede buscar en el verano de 2007. En julio de ese año saltaron a la luz los primeros datos sobre las hipotecas 'subprime', créditos de alto riesgo, que, de pronto, no se podían cobrar. Para agosto empezaron las quiebras y la morosidad se cargó la confianza de los inversores y de los bancos. Buscando por internet, lo que más se recuerda son las bancarrotas de Northern Rock o de BNP Paribas, pero para miles de personas lo más grave fue perder sus casas.
[Esta foto no está incluida en el grupo 'Economic Cluster of 2008']