UNA NUEVA PIEL. Tomada en Plá de Xirau (Alicante). "Una salamanquesa renueva periódicamente su piel para crecer. La capa epidérmica que recubre las escamas se cuartea y se desprende –incluso las lentes transparentes formadas por los párpados soldados que recubren sus ojos-. Durante este proceso el animal es muy vulnerable", describe su autor.